Por - Publicado el 16-10-2007

Leo a Martín Tanaka en Perú 21:

Quienes sostienen que existe una alianza en el Congreso entre el Apra y el fujimorismo deberían fijarse en la alianza entre el Apra y la mitad de la bancada de UPP: allí sí que puede decirse que hay una evidente negociación y transacciones con efectos concretos. En cuanto al fujimorismo, ocurrió lo que preveíamos hace unas semanas: sus relaciones se mantienen estables, a pesar de la extradición y del inicio a los juicios a Fujimori en condición de detenido. ¿Y los que decían que se venía una ruptura de relaciones?
Alineamientos en el Congreso y encuestas

Comentario: Ahora resulta que hay una «evidente» alianza entre el APRA y media UPP, pero no entre el APRA y el fujimorismo. Ahí sólo hay «relaciones». Bueno, es un avance pues antes, según Martín, sólo había «coincidencias». Hablar de «relaciones» avanza la idea de algo que deja de verse como fortuito y pasa a ser reconocido como estable. Claro, es muy curioso que se hable de «relaciones estables» sin que se admita que hay «negociaciones y transacciones con efectos concretos». Como si no hubiéramos visto ya numerosas evidencias de coordinaciones, amenazas, defensas mutuas y hasta festejos en medios de comunicación fujimoristas por la reacción favorable del gobierno aprista hacia Fujimori, con muy claros efectos concretos.

En Consecuencias políticas de la extradicción de Fujimori comentaba que «Hasta el momento, no veo señales de recomposición de su alianza [del APRA] con Fujimori». Es curioso cómo Martín voltea las cosas. Algunos comentaristas especularon con la ruptura de la alianza, no de «relaciones», entre el aprismo y el fujimorismo. Cierto que lo hicieron y no coincidí con ellos. Pero si algo demuestra que la alianza se haya mantenido estable no es que estemos ante una «coincidencia» (término otrora importante, pero hoy discretamente eliminado del análisis), sino ante algo mucho más sólido que, por alguna razón, Martín insiste en que no es una alianza. Habrían evitado una censura ministerial sin «negociaciones» ni «transacciones» con el fujimorismo, pero sí con UPP. Impresionante.

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