Por - Publicado el 21-02-2011

El Perú de Leguía vive una gran expansión económica, impulsada por las exportaciones de petróleo, minerales, azúcar, algodón, lanas. Las compañías estadounidenses como la Cerro de Pasco, IPC o la Grace florecen en el Perú bajo Leguía. Harta obra pública en Lima, con avenidas Leguía, Wilson, Roosevelt. El Perú oficial vive años maravillosos. Y no es lo único. Con el apoyo de los Estados Unidos, el Perú recupera Tacna, sin disparar un tiro. Gracias al Canal de Panamá, construído por los Estados Unidos, el Perú ahora está claramente más cerca de los Estados Unidos y Europa (en particular más cerca que Chile).1 Euforia para algunos.

Pero la procesión va por dentro. El sentimiento en canteras, pozos y cañaverales es de rechazo al patrón imperialista. Un movimiento de trabajadores, estudiantes y campesinos al alza. Masacres en Huancané y Chungui. Haya de la Torre y José Carlos Maríategui forman un núcleo de intelectuales que rechazan el statu quo de un Perú para unos pocos poderosos. Los encarcelan un par de veces, en 1927 aquí y en 1929, aquí, y sobre todo aquí. Por presión de la embajada estadounidense en Lima.

Por esos años los Estados Unidos invaden varios países latinoamericanos y del Caribe, siendo lo más emblemático la ocupación militar de Nicaragua. ¿La razón? Nicaragua quiere construir un canal en su territorio. A los Estados Unidos no les conviene. Ya tienen uno en Panamá y ése tiene que ser el único. ¿Libre competencia? ¿Soberanía de Nicaragua? ¿Democracia? Para quien se la crea. Muchas excusas, siendo lo real que tropas de Marines estadounidenses invaden Nicaragua. Los intelectuales peruanos desde Amauta condenan la invasión y expresan su firme a apoyo a Augusto César Sandino, general del «pequeño ejército loco». Un huanuqueño, Esteban Pavletich, aquí, es su secretario personal. Sandino es la esperanza. En 1928 dedica a los gobiernos de los países latinoamericanos, que le dan la espalda, esta famosa carta:

¿Acaso piensan los gobiernos latinoamericanos que los yankees sólo quieren y se contentarían con la conquista de Nicaragua? ¿Acaso a estos gobiernos se les habrá olvidado que de veintiuna repúblicas americanas han perdido ya seis su soberanía? Panamá, Puerto Rico, Cuba, Haití, Santo Domingo y Nicaragua, son las seis desgraciadas repúblicas que perdieron su independencia y que han pasado a ser colonia del imperialismo yankee. Los gobiernos de esos seis pueblos no defienden los intereses colectivos de sus connacionales, porque ellos llegaron al poder, no por la voluntad popular, sino por imposición del imperialismo, y de aquí que quienes ascienden a la presidencia, apoyados por los magnates de Wall Street, defienden los intereses de los banqueros de Norte América.

Así y todo Sandino logra expulsar de su país a los estadounidenses, que afectados por la Gran Depresión no la tienen fácil para continuar con la ocupación de Nicaragua, que había durado más de década y media. Sin embargo, Sandino es traicionado y asesinado. Surge la dictadura de los Somoza. Los Estados Unidos ya no necesitan ocupar Nicaragua pues tienen aliados internos que gobiernan el país.

Sólo a fines de los setentas cae la dictadura de los Somoza. Los sandinistas la derrotan a través de una guerra revolucionaria. El pueblo peruano simpatiza con los sandinistas. Se ve una nueva Nicaragua. Inmediatamente, al salir Carter y entrar Reagan, viene la intervención estadounidense, que apoya a las dictaduras centroamericanas para evitar que surjan ….dictaduras, sólo que dictaduras comunistas. Por entonces el partido y el gobierno de Alan García, como la socialdemocracia europea, apoyan firmemente a los sandinistas. Sólo en diciembre de 1989 es que los Estados Unidos recuperan decisivamente su influencia en el Perú. Precisamente cuando Alan García izaba la bandera panameña en Palacio, expresando su condena a la invasión de Panamá por los Estados Unidos (celebrada con júbilo en la embajada estadounidense por el sociólogo Fernando Rospigliosi).

Hoy en día en el Perú la embajada estadounidense ya no acosa y manda a la cárcel (a algunos) como hizo con Mariátegui. Ahora los apoya generosamente y los hace danzar a su ritmo. Si los gobiernos izquierdistas no son ninguna panacea (aunque justo es decir que los sandinistas salieron pacíficamente del gobierno nicaragüense después de haber perdido las elecciones), en el Perú ya se fueron al otro extremo. Sin pudor se suman nomás con todo a la agenda estadounidense en su propio país. Silentes en condenar el golpe de estado en Honduras o la intervención estadounidense en Bolivia, andan muy ocupados en su danza. Están convencidos de lo democrático de la agenda de los Estados Unidos en el Perú y en la región latinoamericana.

En el Perú estamos en otra etapa. No nos para nadie.

Sandino ya fue.

¿O tal vez resulte algo haya quedado?

1. Bandera estadounidense capturada por las tropas de Sandino, presentada en un congreso anti-imperialista en México, 1928. Imagen tomada de aquí.

2. Roosevelt con Somoza. Una democracia que apoya dictaduras. Imagen tomada de aquí.

En esta página web se conservan fotos de las víctimas de Sandino, no así de las víctimas de los Marines.


La insurrección de Sandino contra la ocupación estadounidense de Nicaragua.
Imagen tomada de aquí

«1934, el 21 de febrero Somoza reúne a su estado mayor. Hay consejo de guerra en su propia casa. Washington ha decidido la muerte de Augusto César Sandino».
Tiempo Nuevo. Grupo peruano.

1988: Reagan detiene al comunismo en América Central. Violando los derechos humanos, que su antecesor declaraba proteger.
Posteriormente las «Comisiones de la Verdad» impulsadas por los mismos Estados Unidos (El Salvador, Guatemala) limitarían la investigación de esas violaciones a los gobernantes locales (quienes básicamente pasarían piola). La intervención estadounidense en América Central sería ocultada y minimizada. Ni el «Ministerio de la Verdad» de Orwell.

A. Esteban Pavletich, secretario de Sandino, escribió sobre otro peruano que luchó por otro país latinoamericano, Leoncio Prado, quien luchó por la independencia de Cuba de España, pero regresó a su país cuando éste se vio invadido. Luchó hasta el final contra el invasor.
Leoncio Prado era hijo «ilegítimo» del presidente Mariano Ignacio Prado. Si el hijo ilegítimo volvía al Perú en tiempos de guerra; el padre se iba del Perú en tiempos de guerra, dizque a comprar armas. Y el hijo «legítimo» de Mariano Ignacio Prado, Manuel Prado, gobernó al Perú dos veces. Fue el gobierno de los poderosos.
En Pavletich se une la lucha de los nicaragüenses contra la invasión estadounidense con la lucha de los peruanos contra la invasión chilena. Si bien se trataron de dos derrotas, es un mensaje de esperanza de un Perú indeclinable, independiente, que no se rinda ni resigne a aceptar ninguna imposición.

  1. La internacionalización del Canal de Panamá planteada por Haya de la Torres obedecía no sólo a una lógica autonomista latinoamericana, sino también a una lógica geopolítica peruana. []
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Enlaces a este artículo

  1. Peru: Wikileaks and the Presidential Campaign @ Current Affairs
    06-03-2011 - 6:12
  2. Wikileaks, los EUA y la campaña electoral peruana » Globalizado
    12-05-2011 - 17:31

Comentarios a este artículo

  1. Silvio Rendon dijo:

    GCC: Sandino en el Perú http://bit.ly/hSVRoz

  2. Julio Gómez dijo:

    "Sandino", me suena, a ver.. RT @rensilvio GCC: Sandino en el Perú http://bit.ly/hSVRoz

  3. Silvio Rendon dijo:

    GCC: Sandino en el Perú (actualizadon con Pavletich-Leoncio Prado) http://bit.ly/hSVRoz

  4. Silvio Rendon dijo:

    Si el hijo ilegítimo volvía al Perú en tiempos de guerra; el padre se iba en tiempos d guerra, dizque a comprar armas http://bit.ly/hSVRoz