Por - Publicado el 01-02-2010

En el extraño debate surgido a raíz del artículo de Silvio Rendón «Singularidades de la CVR peruana», ciertos defensores de la Comisión de la Verdad y Reconciliación han esgrimido diversos no-argumentos. Por ejemplo, afirman que están «abiertos al debate» pero inmediatamente después descalifican cualquier opinión contraria que no venga de expertos. Y cuando llegan expertos con una actitud crítica, retrucan que están confundiendo al público. Y luego tienen la frescura de decir que no están a la defensiva.

Bueno, esta es una historia de expertos, de antropólogos forenses. Algunos de ellos ya abdicaron de su postura original, dizque para no entorpecer el proceso. Pero sus palabras quedaron registradas, y sus gravísimas acusaciones, que constituyen un baldón más en la historia de la CVR, no podrán ser borradas nunca. Porque el 30 de mayo del 2002 se organizó una conferencia de prensa, en la cual el Equipo Peruano de Antropología Forense (EPAF) en pleno denunció a la Comisión de la Verdad y Reconciliación ante la prensa internacional.

Cualquiera que haya abierto La República del día siguiente se habrá topado con la siguiente nota cataclísmica:

«EPAF RENUNCIA A COMISIÓN DE LA VERDAD
Ana Véliz

El Equipo Peruano de Antropología Forense (EPAF) renunció ayer a seguir colaborando con la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) según denunció su representante José Pablo Baraybar, porque fueron vetados por la Fiscal de la Nación, Nelly Calderón Navarro. Sin embargo la Fiscalía de la Nación y la referida Comisión negaron la existencia de estas presiones.

El EPAF es uno de los dos equipos forenses en virtud de cuyas conclusiones la Fiscalía denunció a 19 comandos Chavín de Huántar de ejecuciones extrajudiciales en el rescate de los rehenes. José Pablo Baraybar, en declaraciones a la prensa extranjera, indicó que en los últimos días recibieron ‘una serie de presiones y amenazas’ por el trabajo realizado en el caso Chavín de Huántar. ‘Se nos trata de descalificar como peritos y eso afecta un juicio, como lo sabe cualquier abogado’, precisó.

El antropólogo mostró una carta de la doctora Calderón, en la que ésta le pide al presidente de la Comisión de la Verdad, Salomón Lerner, que ‘contemple la posibilidad de no proponer a dichos peritos en futuras exhumaciones'».

En respuesta, el 31 de mayo la CVR emitía la siguiente nota de prensa:

«NOTA DE PRENSA Nº 68

En relación con la conferencia de prensa y posterior comunicado público del Equipo Peruano de Antropología Forense

La Comisión de la Verdad y Reconciliación:

1. LAMENTA los juicios emitidos por el EPAF en los que se atribuye haber cedido a presuntas presiones del Ministerio Público que afectarían la investigación de fosas comunes. Asimismo, deplora la renuncia del señor Juan Carlos Tello al cargo de Coordinador de la Unidad de Investigaciones Antropológico Forenses de la CVR.

2. ACLARA a la opinión pública lo siguiente:

a. El señor José Pablo Baraybar, presidente del EPAF, laboró como asesor de la Comisión de la Verdad y Reconciliación del 1° de enero al 8 de marzo del 2002, fecha en la cual renunció voluntariamente a su cargo para atender sus compromisos profesionales con el Tribunal Penal para la ex Yugoslavia. Mientras duró su vínculo con la CVR el señor Baraybar actuó como perito en la diligencia de exhumación de la localidad de Chuschi, propuesto por la CVR y nombrado por el Ministerio Público. El señor Juan Carlos Tello y otros expertos desempeñaron la misma función en aquella ocasión. Es pertinente informar que en momentos difíciles de esas diligencias el equipo del EPAF contó con el pleno apoyo de la CVR.

b. Luego de esa exhumación, y ante la renuncia del señor Baraybar en carta de fecha 6 de marzo de 2002, la CVR decidió crear en su seno la Unidad de Investigaciones Antropológico-Forenses y nombró como coordinador de la misma al señor Juan Carlos Tello.

c. Para la nueva diligencia de exhumación en fase de preparación, la CVR solicitó a la Fiscal de la Nación el nombramiento de tres peritos y siete asistentes, lo que se hizo en consulta con el señor Tello en virtud de su cargo en nuestra organización. La ausencia del señor Baraybar entre los nombres propuestos no puede interpretarse como un veto, sino como natural resultado de su desvinculación voluntaria de la CVR ya mencionada.

d. Los juicios sobre la labor de la CVR vertidos por el señor Juan Carlos Tello en su carta de renuncia dirigida al presidente -e insólitamente comunicada a diversas instituciones- son considerados por la Comisión injustos y precipitados.

3. RECHAZA una actitud que considera incompatible con el cumplimiento de nuestro mandato y que atenta contra las expectativas de las víctimas de la violencia, que son la razón de ser de nuestro trabajo. La CVR rechaza toda insinuación de que nuestro trabajo tenga otro interés que no sea el hallazgo y la exposición de la verdad…».

Como podrán observar, ciertas actitudes no cambian en absoluto. La CVR no respondió al fondo de la acusación: su contubernio con el Ministerio Público, las presiones y amenazas contra el EPAF a causa de las pericias del caso «Chavín de Huántar» y la carta de Nelly Calderón a Salomón Lerner. Prefirieron ampararse en cuestiones contractuales para negar la existencia de un veto, establecer un secretismo injustificable y acusar a los disidentes de «atentar contra las expectativas de las víctimas». En resumen: Jalisco nunca pierde.

Lamentablemente, las opiniones críticas del EPAF tuvieron escaso eco en la prensa nacional. Aparte de la nota de La República y del rebote en algunas listas de correo -entre ellas, Ave Crítica– la prensa supuestamente comprometida con el proceso CVR, como el Perú 21 de Álvarez Rodrich, calló en todos los idiomas. Acaso pesaron más las amistades presentes y las consultorías futuras.

Durante las semanas y meses siguientes, algunas ONG de derechos humanos empezaron a difundir rumores en Internet sobre una «reconciliación» entre el EPAF y la CVR. Lo que en realidad sucedió fue que tanto la CVR como la CNDDHH desarrollaron un trabajo de zapa, presionando a los antropólogos forenses que se hallaban en situación más precaria, para que conformaran un equipo paralelo, dividieran al EPAF y calmaran a la opinión pública mundial, permitiendo la continuidad del accionar del Ministerio Público.

El EPAF reaccionó dignamente, mediante una carta pública de José Pablo Baraybar del 5 de noviembre del 2002:

«Yo, como tantos otros peruanos, esperé el dia en que algún gobierno decidiera crear una Comisión de la Verdad, entendiendo que el país tenía que pasar por la catarsis de mirarse hacia adentro, saber que había pasado y por qué. Además de ello, creía fervientemente que esta Comisión tendría ademas que iniciar un proceso que fuese continuado más allá de su propio mandato y que se ocupara del problema específico de los ‘desaparecidos’ y de las secuelas en la sociedad civil.

…Lo que no se dijo de [las exhumaciones de] Chuschi, para ‘llevar la fiesta en paz’ con el Ministerio Público, fueron las trampitas que hábilmente nos tendieron para cancelar la diligencia el primer día de exhumación, el sacarnos del examen de los restos mediante una segunda resolución de fiscalía, las peleas que se dieron con los médicos de Medicina Legal, con la representante de la Fiscal de la Nación, la francesa Sonia Papi, quien tuvo la osadía de amenazar -ante cámaras del Canal N- al fiscal encargado del caso -el Dr. Enciso dejó de ser fiscal de Cangallo despues de la exhumacion en Chuschi; alguna coincidencia tal vez-, las palabras del Presidente de la CVR, Salomón Lerner, para que ‘José Pablo baje un poco el tono’, ya que en el Perú quien grita es un revoltoso y quien se calla es un hombre probo.

…Da pena ver a todos los ayayeros a los que súbitamente el tema forense les llenó la atención, que se presentaron de la noche a la mañana a trabajar -bien pagados, por cierto- en la CVR; expertos improvisados y mudos. ¿Dónde estaban la CVR, la Coordinadora y todos los demás miembros de la ‘Plataforma’ cuando pasaron al fuero militar el caso Chavín de Huantar, cuando se dieron los incidentes de Huaraz, y ahora con lo del fiscal Escobar? ¿Y las familias? ¿Qué van a ganar de este proceso? Ya hablaron en las Audiencias y no pasó nada, ya preguntaron donde están sus muertos y no pasó nada. ¿Podemos tapar el sol con un dedo? Realmente no lo creo. ¡Creen ustedes que un par de exhumaciones ‘balanceadas’ -una de los militares y una de Sendero, ‘para no despertar a los que estan dormidos’ como hubiese dicho otro prominente miembro de la CVR- resuelve el problema?

¿Alguien aún sigue creyendo que un libro bien empastado y escrito por grandes intelectuales servirá para cerrar las heridas en un pais de analfabetos? ¡Háganme el favor! Verdad y justicia si, pero estando preparados a todas las consecuencias; no pactando, obviando y jugando ajedrez para no quemarse mas de la cuenta.

José Pablo Baraybar
Head, Office on Missing Persons and Forensics (OMPF)
United Nations Interim Administration in Kosovo (UNMIK)
Pristina».

Para los que no creemos en santidades laicas, esta carta derrumbó el mito de la pureza de la CVR y sus supuestas buenas intenciones. En ella, quedan lapidariamente retratados la actitud amenazante de la Fiscal de la Nación, la actitud conciliadora de Salomón Lerner y los comisionados, la intención de «balancear» las investigaciones para no irritar a las Fuerzas Armadas y el cínico juego de ajedrez que la Comisión desarrolló desde un inicio, violando las promesas hechas públicamente a las víctimas.

Ya en ese momento, los antropólogos forenses que habían salido del EPAF, con el mal disimulado apoyo de la Comisión de Derechos Humanos (COMISEDH), estaban en vísperas de formalizar la constitución del Centro Andino de Investigaciones Antropológico Forenses (CENIA). La labor de zapa y división interna, un verdadero recordatorio de las peores tácticas de la difunta izquierda peruana, tuvo éxito. Pero algunos prefirieron conservarse íntegros y hacer el balance de las nefastas consecuencias de tal accionar, en esta carta pública del 21 de marzo del 2003:

«»…Bajo los auspicios de la CVR y luego de la renuncia del EPAF se creó la llamada Plataforma Conjunta para las Exhumaciones en el Peru. Esta agrupación juntó nada más y nada menos al mas puro milagro de San Martin de Porras a la CVR, a la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, al Ministerio Público y a la Defensoria del Pueblo. Para reemplazar a los salientes del EPAF emplearon a un grupo de peritos de Argentina, Chile y Guatemala, junto a ellos trabajaron los nuevos ‘antropólogos’ -sociales- contratados por el Ministerio Público y los expertos de la CVR -un par de miembros del EPAF en licencia indefinida del mismo-.

La plataforma realizó dos exhumaciones importantes, la de Totos y la de Lucanamarca. Ambas exhumaciones fueron bastante distintas, considerando que solo la primera trata de personas reportadas como desaparecidas, mientras la segunda trata de personas asesinadas por Sendero, más no desaparecidas. Considerando la primera exhumación hecha en Chuschi con el EPAF, el número de personas desaparecidas y hechas ‘aparecer’ gracias al trabajo de la CVR no llegan ni a 30 sobre un total (no definido aún) de casi 7.000 desaparecidos, es decir, menos del 0,5% del total.

…Hay que tomar en cuenta que si bien es un signo positivo el haber denunciado a presuntos perpetradores, la CVR no logró recolectar suficiente evidencia material sobre estos crímenes, en otras palabras hallar los restos de las personas que cada uno de estos presuntos perpetradores hizo desaparecer. Por lo tanto cabe preguntarse: ¿prosperarán estas denuncias? ¿De que sirve verificar que en el Estadio de Huanta se produjeron todo tipo de aberraciones cuando no tenemos nada más que testimonios para probarlo?

…Es realmente lastimoso ver como ciertas organizaciones de DDHH hicieron gran propaganda y cubrieron con lujo de detalles las exhumaciones de Lucanamarca y como no dijeron nada cuando el MP empezó a exhumar los restos de los internos del Frontón, caso de la CIDH que podría afectar la carrera política de un ex-presidente de la República. El MP ya se cansó de la Plataforma Conjunta -sobretodo despues del informe de la misma-, la CVR quedó como monitora y las organizaciones de DDHH ni siquiera lograron presentar peritos de parte.

…El Estado se sigue investigando a si mismo, las familias siguen -y seguirán esperando-, los responsables políticos y los altos mandos militares que planearon e implementaron estrategias salvajes contra su propia gente se siguen paseando por las calles. Acabo de leer que la CVR se ha venido reuniendo con ciertos lideres militares como el general (r) José Valdivia Dueñas, el general (r) EP Luis Pérez Documet y el general (r) EP Clemente Noel Moral para ser entrevistados sobre ‘su versión respecto a la estrategia y acciones antisubversivas que les tocó implementar, así como sobre los casos específicos de violación a los derechos humanos que la Comisión viene investigando’.

Cabe comentar que si la CVR quiere saber la versión del general (r) Valdivia sobre Cayara sólo tiene que leer su libro. Tal vez en estas reuniones la CVR logre obtener información sobre el destino de los miles de desaparecidos que aún no aparecen y una vez así obtenida se la pase al MP para implementar su campaña de exhumaciones. Así, al final todos contribuirán a la causa de la verdad, mas no de la justicia.

José Pablo Baraybar
Head, Office on Missing Persons and Forensics (OMPF)
United Nations Interim Administration in Kosovo (UNMIK)
Pristina».

En resumen: en antropología forense, como en muchos otros temas, lo que hay de bueno en el Informe Final de la CVR no es nuevo, y lo nuevo no es bueno. Salvo que los ex-CVR –ceveristas, ceverinos o cevras, lo mismo da- y otros expertos en «justicia transicional» nos presenten como grandes hallazgos del proceso peruano: el haber logrado que el Estado, sin previa depuración, se siga investigando a sí mismo; el que por enésima vez en la historia republicana -con la solitaria excepción de la Comisión Gutiérrez Cuevas- una Comisión del Estado viole promesas públicas de verdad y justicia; el consagrar a los autores de este desaguisado como «héroes de la democracia»; y, finalmente, el presentar esta cuestionable investigación como un modelo exportable.

P.S.(20.06.2013): Durante mucho tiempo, la prensa caviar ha afirmado que lo aquí contado es una fábula inventada a capricho. Hace algunos días recibimos un documento oficial, que compartimos con ustedes y que narra detalladamente la tortuosa conducta de la Comisión en un tema que, gracias al Ministerio Público y sus aliados, tiene hasta la actualidad cerca de 16 mil casos por resolver, con otras tantas familias a la espera.

CVREPAF by avecritica

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Enlaces a este artículo

  1. Tweets that mention Otra polémica de la CVR: las investigaciones forenses » Gran Combo Club -- Topsy.com
    06-02-2010 - 4:07
  2. ECPG - ENCORE CAPITAL GROUP INC - Financial Ratios
    20-10-2010 - 23:32

Comentarios a este artículo

  1. Silvio Rendon dijo:

    GCC: Otra polémica de la CVR: las investigaciones forenses
    Por Ricardo Alvarado http://tinyurl.com/y8nrw7f

  2. Juan Arellano dijo:

    RT: @rensilvio: GCC: Otra polémica de la CVR: las investigaciones forenses. Por Ricardo Alvarado http://tinyurl.com/y8nrw7f

  3. Alfredo P. dijo:

    ¿Y? ¿Qué querían? El mandato de la CVR estuvo limitado desde su origen, pues se trató de una comisión surgida por una hábil maniobra palaciega, en donde una corte de asesores y de activistas (provenientes mayoritariamente de la izquierda no gubernamental) le vendió al ingenuo e inexperto Pdte. Paniagua la idea de una comisión de la verdad; en el contexto del desplome del fujimorismo y en momentos en que estos sectores eran políticamente muy débiles.

    ¿Qué ha ocurrido en el tiempo?, pues los sectores apoyadores de la CVR, básicamente provenientes de la izquierda no gubernamental, han sido barridos del mapa electoral y no tienen ninguna representación en el Congreso (algo que no ocurría en el Perú desde 1978), en cambio los sectores fujimoristas se han reconstruido y sacaron un notable porcentaje de votos (más que el partido del propio Paniagua) y además tienen representación política en el Congreso.

    De este modo, la causa ceverrista no tiene mayor apoyo social, si uno ve a sus principales soportes, se tratan de sectores de oenegés que viven del tema de la CVR, de ex-ceverristas o de activistas derechohumanistas que gracias a este documento tienen publicaciones y/o proyectos, a estos sectores se suman los familiares y amigos de las «víctimas» de la acción estatal (a quiénes se les prometieron en su momento jugosas reparaciones).

    Es esta soledad y total ausencia de apoyo social a la causa ceverrista, ¿se podía esperar otro resultado para la fallida CVR?

  4. Izquierda Perú dijo:

    Otra polémica de la CVR: las investigaciones forenses: En el extraño debate surgido a raíz del artículo de Silvio Rendó http://url4.eu/1ILIQ

  5. Ricardo Alvarado dijo:

    Quienes fueron asesinados, torturados o desaparecidos por las Fuerzas Armadas, la Policía y los grupos paramilitares, así como sus familiares, son víctimas y no «víctimas», lo mismo que quienes fueron asesinados y torturados por SL y el MRTA también son víctimas, sin comillas.

    Las masacres de Chuschi, Putis, Cayara, Pucayacu, Accomarca, Lucanamarca, Acosvinchos, Chungui, etc. son verdades históricas, más allá de los errores o aciertos del Informe Final de la CVR. Dicho sea de paso, estas masacres no las descubrió la Comisión: los hechos ya habían sido establecidos desde mucho antes.

  6. Alfredo P. dijo:

    Quienes fueron asesinados, torturados o desaparecidos por las Fuerzas Armadas, la Policía y los grupos paramilitares, así como sus familiares, son víctimas y no “víctimas»

    Amiguito, aquí en el Perú hubo una guerra desatada por una pandilla de fanáticos ideológizados que querían convertir al Peru en una dictadura comunista similar a la Kampuchea; en una guerra se tiene que matar al enemigo antes de que este te mate a tí, es una pena, pero esa es la realidad.

    Ahora nos vienes a decir que aquellos que tenían un proyecto político totalitario y que fueron derrotados, ahora son víctimas? quieres convencernos que si se mata en combate a un terrorista, este se convierte en una víctima a la que hay que reparar y hacer homenajes?

    Por cuestiones como la que planteas es que la CVR es un documento fallido que merece la desconfianza de la gran mayoría de la población.

  7. Luis dijo:

    Siempre pense, al margen de sus resultados, que una comision de la verdad resultaba de alguna manera apresurada. Me hubiera gustado que se hiciera algunos años despues, cuando las pasiones se hubieran apagado.

  8. Ricardo Alvarado dijo:

    Alfredo, en primer lugar, guárdese su «amiguito» donde mejor le quepa. No está tratando con chiquillos.

    En segundo lugar, es verdad que no hay guerra sin muertos, pero eso es una cosa y otra es mezclar maliciosamente todos los hechos en una licuadora en la cual se mezcla a Sendero y al MRTA con la población civil, a los terroristas muertos en combate con los hombres, mujeres y niños inocentes torturados, desaparecidos y asesinados. La manipulación que usted hace de la historia es REPUGNANTE y cien mil veces peor que cualquier omisión o falla -intencional o no- del Informe Final de la CVR.

    ***

    Luis: Podrías tener razón si te refirieras únicamente al aspecto científico-social del Informe CVR. Pero en cuanto a la necesidad de justicia para las víctimas y castigo para los responsables, esa es una tarea impostergable. Si los asesinos de SL, el MRTA y el Estado quedasen impunes, la afrenta no recae solamente sobre las víctimas, sino sobre la sociedad peruana. Y seguiremos siendo un país en el que los asesinos de masas pasan a la historia como «defensores de la democracia» para usar el vocabulario de Rafael Rey y sus amigos de la ADDCOT.

  9. Michael Regan dijo:

    Recomiendo que entreviste al comandante de la comisaria de San Miguel. Enfrentar al SL con las FFAA fue una locura-casi como si hayan tenido otros fines al elaborar sus estrategias.

  10. jesus cossio dijo:

    saludos:

    1. creo que este tipo de posts quedarian mejor sin los «dizque» o diminutivos seudo-sarcasticos. el tema es grave y no da para lucimientos de humor que no son tales.

    2. el trabajo de la CVR es importante aun con errores y sombras personales. no sé hasta que punto las antipatias contra un grupo («ceverristas») lleva al redactor de estas notas a minimizar la ayuda que el Informe presta a personas que, como yo, estamos interesados en la tragedia del conglicto interno pero no somos univeristarios ni academicos ni becarios, sólo personas buscando información: ¿se preferiría que continuemos a oscuras?

  11. rafo dijo:

    «…quieres convencernos que si se mata en combate a un terrorista, este se convierte en una víctima a la que hay que reparar y hacer homenajes?»

    Asesinaron a mucha gente totalmente inocente con el pretexto de que eran terroristas. ¿A quién pretende engañar el comentarista? Manipulando la informacion como siempre. El Sr. Alfredo apromontesinista ya es algo conocido por los disparates que escribe.

  12. Ricardo Alvarado dijo:

    Jesús, si no te gusta mi sentido del humor estamos iguales; no me gusta el tuyo. Aunque me muero de la risa cuando haces caricaturas de Sifuentes y compañía, me aburren la mayoría de tus obras. Pero gustos son gustos.

    «Dizque» significa «Al parecer, presuntamente». Consulta el Diccionario RAE.

    Reducir los puntos flacos del Informe CVR a una cuestión de «antipatías» es como si yo desvalorizara tus críticas porque no eres solamente «una persona buscando información», sino un divulgador del Informe Final vía tu historieta «Rupay» y, por lo tanto, parte interesada.

    Si te dieran un mapa para orientarte, y alguien te señalara errores puntuales, no serían antipatías; serían aportes. Tú decides si los tomas o no, pero te recuerdo que la ignorancia no es un derecho humano. Si continúas orientándote con un mapa errado, te vas a perder.

    Por último: trabajos como «Rupay», que no se han basado exclusivamente en el Informe CVR, son necesarios y oportunos para generar debates que incluyan a los no-expertos. Ojalá la Fundación Rockefeller se anime nuevamente a financiar la edición, pero esta vez, creo, debería ser masiva.

  13. jesus cossio dijo:

    Ricardo:

    1. Sabes bien a que vienen tus «dizque» y demas. Hay contextos que determinan el sentido de la palabra más alla del mamotetro de la RAE.

    2. Si las antipatias no son importantes, entonces para que bajar el nivel de los articulos con alusiones al parecer personales. Yo mismo tengo importantes diferencias con el INFORME CVR y agradezco cuando se señalan errores puntuales (las notas sobre el capitulo de Puno fueron excelentes) pero mezclar eso con adjetivaciones más propias de Correo me parece desafortunado.

    3. El Informe no es un mapa, pues. Tiene conceptos, datos, testimonios, cronologias.
    Uno puede discrepar de ciertos conceptos e interpretaciones, pero los testimonios recogidos son valiosísimos y uno no puede «perderse» leyéndolos. Todo lo contrario.

    4. La edicion de RUPAY no fue financiada por la Beca Rockefeller. Dos años de investigación, si.

  14. Ricardo Alvarado dijo:

    Jesús:

    1. Es curioso que hables de baja de nivel por un «dizque». Y me sorprende encontrar semejante gazmoñería en un humorista vitriólico.

    2. Ninguno de los colaboradores del GCC ha descalificado los testimonios recogidos o publicados por la CVR. Te has equivocado de contrincante.

    3. Ojalá encuentres otro mecenas para la edición masiva. El Perú la necesita.

  15. Alfredo P. dijo:

    Lo repugnante es la manipulación de la historia que pretenden sectores afines a la izquierda no-gubernamental que quiere hacer pasar a victimarios como «víctimas» a las que ahora hay que homenajear y pagar jugosas reparaciones en dólares.

    Por supuesto que estos mismos sectores son los mismos que quieren evitar hablar del papel que jugaron en décadas pasadas, cuando hablaban de que «el poder nace del fusil», cuando participaban de elecciones a la par que denostaban de la democracia «burguesa» y cuando se negaban a condenar al terrorismo de sus parientes ideológicos.

    No, la gente no es tonta, ya sabe de que pie cojean y por eso no necesita de su CVR para conocer la verdad.

  16. Miguel dijo:

    Varios puntos
    1-El informe final es importante a pesar de sus deficiencias por
    a-por primera vez el estado peruano reconoce al menos en parte las causas , proceso y conseucncias del conflicto armado interno
    b-mostrar aunque sea de manera icompleta los niveles y extensión que alcanzó dicho conflicto, así como sus horrores

    2-Discutir algunos puntos flacos del informe de la CVR, de su trabajo, o discutir las opiniones o trayectoria de los ex-integrantes de la CVR (yo mismo trbaje un tiempo ahi), no equivale a descalificar in toto todo el trabajo de la CVR.

    3-Alfredo P: en todo conflicto hay víctimas combatientes, e incluso uno puede aceptar que pueda haber víctimas civiles no intencionales («daño colateral»). Eso es una cosa, otra es la violación masiva y sistemática de las campesinas andinas, el uso de la tortura de manera sistemática, el que cada cierto tiempo se realicen matanzas de mujeres, ancianos y niños. Lo último es moralmente inaceptable e inexcusable: toda la desorientación del combate no pueden justificar una violación o el asesinato extrajudicial de personas o la tortura o las matanzas masivas. Denunciar ello no es hacerle el juego a Sendero, es tener un mínimo de decencia.