Por - Publicado el 09-05-2009

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Varios obispos católicos que trabajan en la selva peruana se pronuncian a favor de los nativos amazónicos, aquí.

Estos obispos se manifestaron también el año pasado, a favor de la primera gran protesta amazónica, ver aquí, Servindi.

Imagen tomada de aquí, CEP.

A falta de partidos políticos, distraídos ellos en sus entripados y perspectivas electorales, que digan algo claro y fuerte a favor de los nativos amazónicos, el comunicado de diversas autoridades eclesiásticas católicas ha sido un gran espaldarazo a la protesta nativa. El gobierno ya estaba pasando de la pasividad a la actividad: de ignorar la protesta a desprestigiarla y a reprimirla.

A través de Mauricio Múlder, quien alguna vez fungiera de estar en el «ala izquierda» del APRA, el gobierno ya estaba comenzando su campaña de desprestigio contra los líderes amazónicos. Múlder ya estaba desprestigiando a Alberto Pizango, siguiendo el libreto aplicado a otros políticos. El primer ministro Yehude Simon ya estaba descalificando la protesta nativa como producto de una manipulación política. El comunicado de los obispos católicos llena un vacío en la escena política nacional. Están abusando impunemente de los nativos. El Perú oficial, el grueso de su sociedad civil, sigue ignorando a los nativos.

Las iglesias evangélicas también se manifestaron a favor de la causa nativa el año pasado, ver aquí, pero no se hicieron sentir este año. Todavía.

El año pasado hasta el cardenal Cipriani se manifestó por el diálogo del gobierno con los nativos, aquí, El Comercio, después de derogada la «ley de la selva». Este año no se ha manifestado. Todavía.

Los sacerdotes, como poder fáctico, son quienes se movilizan «en última instancia», cuando los partidos no lo hacen. Es como en economía que el banco central tiene la función de ser el «prestamista en última instancia», cuando todos los otros prestamistas fracasan.

En el país hay una movilización sin cauce oficial. ¿Dónde están los congresistas, representantes y medios de estos nativos? ¿Por qué no tienen canal o representación oficial para expresarse? Si hay oposición al gobierno, ésta debería estar en el congreso, haciéndose sentir, o al menos en el gobierno regional. Los comunicados como el de los obispos son propios de las dictaduras (salvo cuando se trata de temas como el matrimonio homosexual o el aborto), cuando los partidos políticos están prohibidos y la gente tiene miedo de hablar.1

alfredodesarrollo.

El año pasado el gobierno utilizó fondos del PNUD para su campaña de desprestigio contra los nativos amazónicos. El caricaturista cayó en desgracia porque se destapó que le estaban pagando por sus contenidos.

Este año, después de capear las denuncias de los petroaudios, el gobierno volvió a la carga con el ataque a los nativos, esta vez con menos oposición mediática. ¿Cómo lo hizo?

Imagen de Alfredo Marcos tomada de aquí.

  1. Quienes supuestamente dirigen partidos políticos están «escuchando el clamor de los pueblos amazónicos», aquí, Susana Villarán. Más que la locomotora, son el furgón de cola. []
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