– ¿Hizo Montesinos campaña por García?
Raúl Wiener lo afirma aquí, La Primera. Denuncia a seguirle la pista. En las encuestas de 2006 hubo cosas raras, ver aquí.
– Manipulación retro
En esta línea ha vuelto a salir información sobre cómo García destacó un grupo de campaña para tumbarse a Vargas Llosa a través de Página Libre (recordada recientemente por la muerte del periodista Guillermo Thorndike), que contó con la colaboración de personas entonces de izquierdas. Tan es así que el mismo García sacó el tema del armario para jactarse públicamente y decir que es su «oficio» tumbarse candidatos que no le gusten: García: Puedo bloquear al candidato que no quiera, Perú 21.
– Mensaje contraproducente al inversionista
Tal vez algunos inversionistas tomen las declaraciones de García como una buena señal y piensen que un dictador o un gobernante tramposo les pueda garantizar las inversiones. Sin embargo, no faltará quienes digan «no me defiendas así, compadre». Anunciar algo así como una trampa en las elecciones atenta contra el libre juego democrático y no augura nada bueno para el país.
– El Padrino 2
Conviene recordar esta escena de El Padrino donde Fulgencio Batista se reúne con los inversionistas extranjeros y les garantiza seguridad a sus intereses en Cuba. Sólo Michael Corleone la vio.
Fulgencio Batista a finales de 1958: Todo anda bien
Se tendría que rehacer la escena con García y los representantes de Yanacocha, Shougang, Telefónica, Lan Chile, LNG, AFPs.
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25-03-2009 - 17:10
10-07-2009 - 19:40
Comentarios a este artículo
26-03-2009 10:55
No sé si alguien en el GCC ha oido ya las últimas declaraciones de García, dignas de un discípulo de Gobineau y no de Bourricaud.
La velocidad con la que García lanza despropósitos viene superando la del GCC para desgranarlos.
26-03-2009 11:15
Al menos yo he oído de ellas y las he visto, como que están ahí comentadas, resaltando el efecto que éstas tienen en la inversión extranjera.
26-03-2009 15:47
La comparación con la escena de Batista es el mejor comentario que he encontrado a las «imperiales» garantías de nuestro Presidente. ¡Buena!