Por - Publicado el 10-08-2006

Lo habíamos comentado en el post el quechua en el congreso. Hoy leo a Aldo Mariátegui:

No a runtusapadas
1) La demagogia es alucinante en el Perú. Dos legisladoras quieren siempre hablar en quechua en el Congreso y con traductores. Eso no tiene lógica porque a) ambas hablan perfectamente el castellano y b) su auditorio –el resto de parlamentarios– está formado por hispanoparlantes. Además, el quechua que hablan es propio de sus regiones y, como se sabe, los quechuahablantes de otras zonas a menudo no entienden ni jota del runasimi hablado en otras partes. Ergo, no “están representando a todo el mundo quechua”, como falazmente alegan. Y que no se refugien en la boludez de que es “racismo” no aceptar su disparatada posición. ¡Manan! Es simple lógica. ¿Acaso los diputados catalanes y vascos hablan en sus respectivos idiomas y con traductor cuando exponen en el Congreso español? Pues no. Nunca. Y estamos hablando de uno de los países más tolerantes del mundo en cuanto a pueblos distintos. Eso tampoco se da en México. Nadie habla en galés en el Parlamento inglés ni en bretón o en langue d’Oc en Francia. Ojo, no estoy para nada en contra del quechua y aplaudo interesantes iniciativas, como la de Microsoft, de crear páginas y programas en dicha hermosa lengua. Pero siempre estaré en contra de la demagogia y la estupidez, más aún cuando éstas se escudan en coartadas absurdas. ¡Traductor! ¡Están en una sesión del Congreso peruano, desubicadas, no en la ONU! ¡Manan! Que se vayan a la porra este par de disforzadas (pero para cobrar instalación bien que gritan ¡ari, ari, ari!). Déjense de runtusapadas*.

Este señor se equivoca:

  • “ambas hablan perfectamente el castellano”. ¿Y? El quechua también es oficial y estas representantes han elegido hablar en quechua. Es su decisión, no la de otros.
  • “su auditorio –el resto de parlamentarios– está formado por hispanoparlantes”. ¿Y? Que les pongan un traductor y ya.
  • “el quechua que hablan es propio de sus regiones” ¿Y? Eso no les quita ningún derecho. Ellas representan ante todo a sus regiones. Por ahora, si alguien habla quechua en el congreso, son ellas. Con este ejemplo, los representantes de otras regiones se animarán a hablar en sus variedades regionales. Pero claro, no habrá ninguna variedad del quechua en el congreso si nadie lo habla.
  • “Y que no se refugien en la boludez de que es “racismo” no aceptar su disparatada posición”. Prohibir expresarte en tu idioma en tu propio país, ¿qué es? ¿Igualitarismo? ¿Respeto a los derechos de otros?
  • “¿Acaso los diputados catalanes y vascos hablan en sus respectivos idiomas y con traductor cuando exponen en el Congreso español? Pues no. Nunca. Y estamos hablando de uno de los países más tolerantes del mundo en cuanto a pueblos distintos”. Más que falso. Claro que sí han hablado en su idioma, hasta que Manuel Marín lo prohibió unilateralmente. Tampoco es cierto que España sea «uno de los países más tolerantes del mundo en cuanto a pueblos distintos». ¡Por favor! (Recomiendo el blog del catalán Jordi Orwell, en particular este post sobre la pluralidad lingüística en España e incluso este post sobre !el bilingüismo en el Perú!). El tema para nada está zanjado en España. Los catalanes, fundamentalmente ellos, siguen insistiendo en hablar en su idioma en todas las instancias del estado español (Algo sé al respecto. Es uno de mis temas. Ver: The Catalan Premium: Work and Language in Catalonia). ¿Por qué no poner como ejemplo a Canadá, país mucho más tolerante que España en este tema, donde cada representante político puede hablar en su idioma sin objeciones?
  • “¡Traductor! ¡Están en una sesión del Congreso peruano, desubicadas, no en la ONU! ¡Manan! Que se vayan a la porra este par de disforzadas”. Pues, el Perú también es de estas representantes y de quienes ellas representan, con su idioma materno incluído. En el fondo lo que está en discusión es qué tipo de país oficial queremos, un país centralista monolingüe o un país multilingüe. El país real es multilingüe. No sólo la ONU tiene traductores. El Parlamento canadiense tiene traductores, se comunica perfectamente y no es el fin del mundo. No es que no sea posible. Es un tema de voluntad.
  • «Ojo, no estoy para nada en contra del quechua y aplaudo interesantes iniciativas, como la de Microsoft, de crear páginas y programas en dicha hermosa lengua». No es suficiente. Eso es un detalle apreciable, pero sin mayor trascendencia en la vida de un quechua-hablante. Son manicitos, peanuts. Una persona debe ser capaz de desarrollarse en su idioma en todas las instancias públicas. Sino sólo se es un/a ciudadano/a de segunda clase.

Leyendo a Aldo Mariátegui y su mandada a la porra viene a mi mente el artículo de la historiadora peruana Cecilia Mendez Incas sí, indios no: Apuntes para el estudio del nacionalismo criollo y cómo en la Lima de mediados del siglo XIX se burlaban de Andrés de Santa Cruz: «¿Por quí hombre el Bolivia dejas?/¿Por quí buscas la Piru?».

Yo sólo espero que las congresistas insistan, dejen de ser «prisioneras en su tierra», como diría Alicia Maguiña, y sin complejo alguno sigan hablando en su idioma en los niveles más altos del estado peruano. No es momento para retroceder.


El primer ministro, anglófono, ante el parlamento canadiense. Nótese los audífonos para que los francófonos puedan escuchar la traducción simultánea en francés.

Para ilustrarse sobre el tema del multilingüismo en instancias oficiales recomiendo este post del catalán Jordi Orwell: Cooficialidad lingüística: sí se puede. Es que sí se puede…

Actualización: Leemos

¿Qué tiene de excéntrico hablar en el idioma materno? Será que los editores de esta página web argentina temen a que el ejemplo se contagie a otros países, entre ellos la Argentina?
Afortunadamente, este medio argentino es más mesurado:

  • Dos congresistas nacionalistas hablarán en quechua en pleno
    El anuncio lo hicieron en rueda de prensa. Solicitaron un intérprete calificado y certificado por la Academia Mayor de la citada lengua.

    En un momento llegó a decir que ambas congresistas se burlaban de la majestad del Congreso, opinión no compartida por los representantes de otras bancadas. Sumire y Supa dijeron que «dichas lenguas deben ser preservadas y su uso oficial promovido en el marco de lo dispuesto por el artículo 48 de la Constitución». Para decirlo en quechua: Uyariy (escuche), Martha Hildebrandt. En la conferencia participaron Marcelina Vargas, de la CC, Demetrio Túpac Yupanqui, de la Academia de Quechua, y Miguel Palacín, de CONACAMI.

Hablar en la lengua materna es una burla para algunos. La Academia Mayor de la Lengua Quechua es una realidad. Lleva ya varios años en funcionamiento. Toca ganar oficialidad de una vez por todas. A pesar de lo que digan algunos:

Hablar la lengua materna es «entercarse». Pues sí, algo terco hay que ser para no dejarse aplastar. Ladran sancho….

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